¿Por qué dar un masaje erótico a mi pareja?
Un masaje erótico es un tipo de masaje que además de ser relajante y proporcionarnos bienestar como cualquier otro, también lleva a un gran estado de excitación a la otra persona.
El fin de este masaje no es el coito sino que este es uno de los posibles desenlaces cuando se realiza este masaje a una pareja sexual. El objetivo, sin embargo, es experimentar la sexualidad propia y de la otra persona, crear intimidad y confianza con la pareja sexual y conseguir el autoconocimiento.
Por su puesto, si el masaje es entre los miembros de una pareja, este será de gran utilidad para mejorar su intimidad sexual. Un espacio para dar placer al receptor donde este toma consciencia de su propio cuerpo y que le conduce a una liberación sexual propia y con su compañerx.
Cómo comenzar el masaje erótico
Es sumamente importante ambientar el lugar donde se dará el masaje. Podemos conseguir un ambiente íntimo que invite a relajarse y dejarse llevar a través de diferentes factores. En primer lugar, consigue una luz tenue y cálida, para ello puedes modular la intensidad de la luz – si no tienes esta posibilidad prueba a colocar una tela fina encima de una lámpara – y por supuesto unas velas.
Las velas no solo sirven para una iluminación tenue sino también aportan aroma. La aromaterapia es clave porque influye en el ambiente que se va a crear y cómo os vais a sentir, puedes elegir aromas afrodisíacos y estimulantes como es el de los frutos exóticos o más relajantes como la lavanda.
Ten en cuenta que mostrar iniciativa y seguridad es fundamental para que tu pareja se deje llevar, además una buena comunicación sobre qué parte le gusta más que masajeen o la intensidad del masaje hará que esta experiencia vaya mucho más allá. Ten en cuenta que tu pareja puede descubrir zonas erógenas que no conocía antes o que nunca se habían acariciado en un masaje erótico, por lo tano es momento de descubrir y escuchar.
Sube un poco más y detente en las corvas, la parte de detrás de la rodilla. Todas las zonas de piel fina que son pliegues son altamente sensibles, además de las corvas también lo son las axilas y las ingles. Acaricia suavemente y observa a tu pareja, al ser una zona tan sensitiva puede que solo necesite que te detengas ahí unos segundos y pases a la siguiente zona porque además de placer, también produce muchas cosquillas.
Utiliza más aceite cuando sea necesario, en zonas como las nalgas puedes usar también el aceite caliente de las velas de masaje. Verás cómo el efecto calor hace que tu masaje sea aún más sensual y excitante. En las nalgas masajea moviendo los pulgares en círculos y combina este movimiento con un masaje lineal de abajo hacia arriba. Si quieres ir un poco más allá, separa las piernas de tu pareja y cuando estés en la parte inferior de la nalga haz que el movimiento llegue a sus ingles pero sin ir más allá.
Con las palmas extendidas ve hacia arriba, de las nalgas al cuello repitiendo este movimiento 3 o 4 veces. Ahora céntrate en la espalda, haz movimientos circulares primero de un lado de la columna vertebral y luego, del otro. Este es el mejor momento para que tu pareja sienta el tacto de tu cuerpo, no uses solo tus manos, deja que sienta por unos instantes tu cuerpo rozando su espalda cuando estés masajeando el cuello. Además de ser muy sensual, ayuda a crear una sensación más fuerte de cercanía.
El mejor masaje erótico
El aceite para masaje va a ser tu mayor aliado. Ponlo en tus manos y frotalas para calentarlas para que el contacto con la piel de tu pareja sea agradable desde el primer momento. Es muy agradable seguir un orden en las zonas que se masajean porque hace que el placer vaya in crescendo.
Hay varios órdenes que puedes seguir, con la práctica descubrirás cuál es el que más le gusta a tu pareja. Nosotros te proponemos empezar desde los pies e ir subiendo. Los pies son zonas erógenas muy importantes porque además de producir placer per sé también son zonas reflejas. Esto significa que están conectadas con otras áreas del cuerpo y el placer lo sentiremos tanto en el pie como en su zona refleja. Además de ser doblemente agradable, también es una zona que nos ayuda a crear mucha expectación y por lo tanto a incrementar el deseo en nuestra pareja. Para la persona receptora será una sorpresa sentir placer en la zona refleja que no está siendo tocada y se dejará llevar mucho más.
Es el turno de los hombros y el cuello, haz movimientos circulares con los pulgares desde el centro de la espalda hacia los hombros. Tómate tu tiempo en besar y lamer el cuello e incluso experimenta un poco más en la zona erógena de las orejas, lee las mejores técnicas en la entrada de masaje erótico en las orejas.
Ahora que tu pareja ya está relajada puedes dar por concluido el masaje o pedirle que se dé la vuelta y seguir por el torso. Los pezones son una zona tan erógena y de reacciones tan placenteras que incluso algunas personas pueden llegar al orgasmo solo con la estimulación. Puedes experimentar hasta saber cuál es la presión y el ritmo que más le gusta a tu pareja, lo descubrirás ya sea preguntándole o basándote en sus gemidos y reacciones al acariciarle.
Ahora puedes poner en práctica todos los consejos o si lo prefieres puedes acudir primero a Shiva Massage, nuestro centro de masajes eróticos en Barcelona para disfrutar de esta experiencia de la mano de nuestras mejores masajistas.