Amor, erotismo y sexualidad parecen ser los tres conceptos que más dudas nos generan en algún momento determinado de nuestras vidas. ¿Qué es amor? ¿Y erotismo? ¿Y sexualidad? ¿Qué diferencia hay entre estos términos? Sobre todo es durante la adolescencia cuando empezamos a plantearnos tantas cuestiones. A pesar de que sus significados y matices podrían parecer sencillos, no lo son. Para no tener problemas en un futuro, hay que tener muy claro cada uno de estos conceptos y, por encima de todo, el contexto al que pertenece cada uno. Los masajistas de Shiva saben cómo diferenciar amor, erotismo y sexualidad, y lo demuestran con sus habilidosas manos y el contacto con su cuerpo. ¿Qué es lo que ellos tienen tan claro?
El amor
El amor es un sentimiento, pero también una decisión. Cada uno de nosotros elige a la persona que cree indicada, con la que quiere compartir, en un principio durante el resto de su vida (o al menos un período de tiempo indefinido, sin final visible), sus vivencias diarias. El amor implica invertir tiempo en la persona que amamos y compartir con el otro todo tipo de sensaciones: alegría, angustia, orgullo, felicidad, dolor, tristeza, disfrute… Este sentimiento o decisión estará presente en nuestras vidas desde los primeros años, y empezará a manifestarse de forma afectiva con los padres, los familiares y las personas que viven a nuestro alrededor.
El erotismo
Se refiere al amor que se expresa únicamente entre la pareja y, además, se refiere a todo encuentro, todo acto que precede a la relación sexual o a la más intensa excitación. Los juegos, las caricias, los besos y el masaje erótico son las manifestaciones más claras del erotismo. Este tipo de “amor” puede practicarse con aquella persona que hemos elegido amar, pero también con cualquier otra que nos suscite algún tipo de conexión, ya sea física o intelectual. Esta “conexión” es la que establecen nuestras masajistas eróticas con sus receptores, y les hacen vivir una experiencia erótica de un placer sin igual.
La sexualidad
Según el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la sexualidad es “el conjunto de sentimientos, emociones, actitudes, pensamientos, comportamientos, aspectos físicos, impulso o deseo sexual, placer, la posibilidad de procrear siendo hombre o mujer, la identidad femenina y masculina y los roles asociados al género”. Cada persona debe aprender a identificar su sexualidad y descubrir realmente quien es. El papel de este término es también muy importante para la calidad de vida y las relaciones interpersonales.