Muchas son las personas que ya saben que todo el cuerpo es una gran zona erógena. Todas las partes tienen su propia sensibilidad y crean placeres únicos que sólo se pueden experimentar al estimularlas. El masaje erótico es la práctica que mejor consigue la satisfacción absoluta: a partir de la sensualidad y el tantrismo, encuentra el punto de excitación de cada zona del cuerpo. Sin embargo, la intensidad del placer no es la misma en un sitio u otro. Tanto hombres como mujeres tenemos preferencias, unas áreas más abiertas al contacto y otras menos. ¿Cuáles son los puntos de placer del cuerpo del hombre? Desde Masajes Shiva te damos algunas pistas:
- El cabello: el cuero cabelludo alberga muchas terminaciones nerviosas que lo convierten en la zona ideal para estimular antes o después de un encuentro sexual, como también en el transcurso de un masaje erótico. La mejor manera de encontrar el placer que genera es utilizando todos los dedos, sobre todo los pulgares, y completar el masaje alrededor de la frente.
- Los párpados: los párpados son muy sensibles, como también la piel que los rodea. Besarlos suavemente o acariciarlos activa de forma instantánea el instinto sexual del hombre.
- La boca: los labios son la entrada principal al cuerpo y, como los párpados, una zona tremendamente sensible. Por ello, los besos y los lamidos son esenciales para despertar el deseo sexual. Sin embargo, no únicamente se trata de besar, sino de dar con el tipo de beso adecuado para despertar la máxima excitación.
- La oreja: el cartílago de la oreja es considerado uno de los rincones más excitantes del cuerpo y, como el cabello, tiene infinidad de terminaciones nerviosas. Los besos y caricias en la zona del cuello y la oreja son una gran debilidad para el hombre.
- La espalda: en el centro de la espalda hay muchas conexiones nerviosas, ya que la piel necesita sensibilidad para proteger la espina dorsal. El contacto y los masajes con cambios de intensidad en esta área relajan el cuerpo y lo preparan para el más puro erotismo.
- El pecho: una vez acariciado el cuero cabelludo en un masaje erótico, entretenerse en el pecho crea expectativas y excitación.
- Las rodillas: a pesar de ser una de las zonas que más nos olvidamos, las rodillas están llenas de terminaciones nerviosas. Besar y acariciar la parte de atrás le permitirá descubrir el placer que pueden llegar a almacenar.