Tan solo se ha llegado a popularizar un capítulo, el de las posturas sexuales
Está escrito en verso, en lengua sánscrita, y se atribuye al poeta indio Vatsyayana Mallanaga, quien practicaba el hinduismo.
De alguna manera es extraño, o cuanto menos curioso, que un texto escrito hace miles de años todavía tenga un impacto tan grande en lo que respecta a la imaginación erótica o que lo sigamos tomando como guía para nuestro desarrollo sexual.
La parte desconocida del Kamasutra
Se trata de una guía para conducir al hombre hacia el reconocimiento del propio deseo y de su naturaleza amorosa, y busca guiarle en su transformación de buen hombre y buen amante. Debido a la época y la cultura en la que fue escrita la obra solo se dirige a hombres, aunque no por ello somete a las mujeres como otras culturas hicieron. La unión sexual es vista como una más de las vías en las que el ser alcanza la plenitud tanto para el hombre como para la mujer.
Los demás libros hablan de los aspectos que debe considerar un hombre para tomar una esposa, de las clases sociales y cómo tratar a cada una ya que la sociedad india se encontraba rígidamente estratificada en castas. También explicaba cómo cortejar y cómo crear confianza en la futura esposa.
Al ser un libro que evita los juicios morales a los que estamos acostumbrados del lado de las culturas judeocristianas, también da consejos sobre cómo ganar los favores de las esposas de otros hombres indicando cuáles pueden ser seducidas y cuáles no o cómo lograr convertirse en su amante. No solo explicaba técnicas de seducción, también enseñaba a los hombres a cultivar todo su potencial.
En el capítulo tercero le enseña al hombre la importancia del estudio de las 64 artes —cuyo número corresponde al de las posturas de la unión sexual— para cultivarse como un hombre que desarrolla todo su potencial en todas las áreas posibles. Algunas de las habilidades que destaca son: cantar, tocar un instrumento, bailar, escribir y dibujar, tocar música con vasos de agua, la magia, el arte culinario, la mímica y la imitación, la química y la mineralogía, el arte de hacer hablar a los loros, el arte de perfumar el cuerpo y el pelo, componer poemas, saber de diccionarios y vocabulario, y el arte de la guerra.